Alrededor de 20.000 personas han acudido a Retro Galicia, el Salón del Vehículo Clásico y de Época de Galicia, que durante este fin de semana ha celebrado su segunda edición, teniendo como escenario el recinto ferial de Amio, en Santiago de Compostela. La numerosa afición que en Galicia tiene este sector, las larguísima lista de actividades o la oportunidad única de “viajar al pasado” que este salón representa, son varias de las razones del éxito de un monográfico que está llamado a convertirse en una cita cada vez más asentada.
El salón compostelano fue inaugurado por D. Xerardo Conde, Alcalde de Santiago de Compostela, y por Dña. Reyes Leis, Concelleira de Turismo y Mercados, el viernes 17, en la primera de las jornadas repletas de actividades que han ofrecido al visitante más de 18.000 metros cuadrados de exposición.
Retro Galicia ha constado de tres días donde el automóvil y la motocicleta clásicos han sido los protagonistas, en esta ocasión con una especial relevancia por parte de la firma Porsche, cuyos vehículos deportivos han sido objeto de admiración en una exposición retrospectiva en la que no faltaron muchos de sus modelos más emblemáticos, partiendo del original 356, al revolucionario 959 que marcó toda una época, e incluso contando con el superlativo Porsche Carrera GT, que a punto de cumplir diez años sigue siendo uno de los automóviles más rápidos del mundo. Todo ello por supuesto sin olvidar las diferentes versiones del 911, un coche que está a punto de cumplir cincuenta años y cuyas tres mágicas cifras siguen representando un verdadero objeto de deseo para todos los amantes del automóvil. Estuvieron además presentes varias unidades de competición como el agresivo 935 LM (una unidad que en su momento compitió en Le Mans, y cuya cotización en el mercado supera con creces el medio millón de euros), el 911 SC “Grupo 4” de Jesús Ferreiro, o los 997 GT3 que habitualmente emplean en ralis Sergio Vallejo e Iván Ares.
Además de ello, Retro Galicia también fue el punto de reunión para los propietarios de vehículos Porsche, e incluso el sábado a última hora se celebró una charla coloquio con pilotos de ayer y hoy, cuya carrera deportiva ha estado estrechamente ligada a los vehículos de la firma de Stuttgart. Es el caso de Beny Fernández, Julio Gargallo, Sergio Vallejo o Jesús Ferreiro, cuyas respectivas anécdotas resultaron de los más animado.
Pero evidentemente, no todo fueron Porsche. También se pudo disfrutar de una magnífica colección de motocicletas españolas de trial de 1950 a 1985 (con populares modelos de Montesa, Bultaco o JJ Cobas, entre otras marcas), de vehículos realmente singulares como el Dodge Boulevard (del que sólo llegaron a fabricarse 18 unidades) y auténticas joyas sobre ruedas, caso por ejemplo de un Jaguar Mk4 de 1938 que atrajo las miradas de todos los que se lo encontraban, la unidad de Renault 5 Turbo pilotada a mediados de los años ochenta por Jesús Puras en los ralis españoles, un Lancia Delta Integrale ex oficial, o incluso un camión original Barreiros Saeta perfectamente restaurado y que recibía a todos los visitantes en la entrada al recinto, por citar sólo algunos ejemplos.
Aquel que haya visitado Retro Galicia, se ha podido encontrar con infinidad de oportunidades para comprar un vehículo clásico. Y si ya era poseedor de uno, no sólo se habrá encontrado con un aparcamiento especial habilitado, sino que además ha tenido un descuento en el precio de la entrada, e incluso ha dispuesto de todo lo necesario para disfrutar del mismo: Desde la oportunidad de pasar la ITV en una unidad móvil de la empresa Supervisión y Control, contratar una póliza de seguro en las mejores condiciones o adquirir todo tipo de recambios, hasta la opción de comprar una lona para conservar perfectamente el coche en el garaje e incluso descubrir todo tipo de productos para la limpieza y mejora del estado de su vehículo.
No en vano numerosos clubes de automóviles antiguos decidieron visitar Retro Galicia, caso por ejemplo de las concentraciones del Club Seat 600 o la del Club 124, 1430 y 124 Sport. Hasta el Rali Rías Baixas Clásico, cuyos tramos discurren tradicionalmente por la provincia de Pontevedra, desvía su recorrido para realizar una sección final con llegada al recinto ferial de Amio y donde nos brindaron un bonito espectáculo en el circuito que había fuera del recinto.
La afluencia de visitantes de todo el noroeste peninsular, especialmente de Portugal, ha mostrado a las claras la afición existente por el vehículo clásico, y es un importante motivo para la continuidad de este certamen.