El piloto de Monterroso ha comprado el BMW con el que la temporada pasada disputó el Rallye Comarca da Ulloa y lo reestrenará en el Rallye Ribeira Sacra (20 – 21 de septiembre) con Diego Rodríguez de copiloto.
Animado por la experiencia del año pasado en el Ulloa, Mario Saa adquiría en el pasado mes de junio un coche que ya conocía y con el que disfrutó de lo lindo, el BMW 328i que anteriormente perteneció a Borja Cotobad. La idea de Mario era reestrenarlo en el Rali Botafumeiro, pero una pequeña enfermedad se lo impidió: «Cuando conduces un trasera te queda ahí un gusanillo, que sabes que tarde o temprano acabarás repitiendo. Tras abandonar el proyecto del Cinquecento me decidí a comprar este BMW y estoy seguro que fue una de las mejores decisiones que tomé en mi carrera automovilística».
«Tenía en mente competir en el Botafumeiro, un rallye que me apasiona, pues me parece que tiene unos tramos muy divertidos para este tipo de monturas, pero una bacteria de las jodidas (risas) hizo que tuviese que pasar varios días en el hospital, frustando así mi reestreno con este vehículo. Tras recuperarme un poco me tocará correr por tercera vez el Rallye Ribeira Sacra».
En esta cita Mario también cambiará de copiloto, pues por primera vez competirá junto a Diego Rodríguez, un joven copiloto que tan solo ha disputado dos carreras en el asiento de la derecha. Mario sabe que esta primera prueba se la tendrán que tomar con calmar para así poder estar en la meta de esta prueba: «Este será un rallye de adaptación, tanto con el BMW como con Diego. El objetivo es ir mejorando con el paso de los tramos, ir conociéndonos los dos para así estar en el parque cerrado final, y si nada se tuerce poder disputar el Rally San Froilán pensando ya en los tiempos y en conseguir un buen puesto final».